Los varistores de óxido metálico (MOV) desempeñan un papel crucial en la protección contra sobretensiones al proporcionar un medio confiable para limitar los picos de voltaje y proteger componentes electrónicos sensibles. Estos dispositivos están fabricados con óxido de zinc y otros materiales que presentan características de resistencia no lineal, lo que les permite absorber eficientemente el exceso de voltaje. Cuando ocurre una sobretensión, el MOV cambia rápidamente su resistencia para desviar la corriente del pico lejos del circuito protegido, evitando daños.
Nuestros MOV están diseñados para satisfacer una amplia gama de aplicaciones, incluyendo electrónica de consumo, sistemas automotrices y maquinaria industrial. Son esenciales para garantizar la compatibilidad electromagnética (EMC) y minimizar la interferencia electromagnética (EMI), que puede alterar el funcionamiento de los dispositivos electrónicos. A medida que la demanda de protección confiable contra sobretensiones sigue creciendo en diversos sectores industriales, nuestros varistores de óxido metálico se destacan por su alto rendimiento, fiabilidad y adaptabilidad a diferentes condiciones ambientales. Al elegir los MOV de Jaron NTCLCR, los clientes están invirtiendo en la durabilidad y seguridad de sus sistemas electrónicos, asegurando su funcionamiento incluso ante sobretensiones inesperadas.